‘¿Tú también ayunas?’ preguntó Sami. La miré con incredulidad y respondí en un tono irónico: ‘El ayuno existe desde hace mucho más tiempo que el Islam…‘. Esto abrió una gran caja de preguntas que mi amiga tenía con respecto al ayuno y la conversación se extendió sobre los diferentes tipos de ayuno – con agua, sin agua, de varios días de duración, de sol a sol, y lo más importante; la razón por la que ayuno – no para ganar favor y puntos con Dios, sino para adorar y crecer más hambriento y cercano a Él. También le dije que esta era una gran diferencia entre nuestros ayunos.
Incluso como seguidores de Jesús, nosotros mismos podemos quedar atrapados en un insidioso ciclo de legalismo. Por favor, oren por nuestros amigos Rohinyá que adoran a Dios desde un lugar de miedo y distancia. Oremos para que también lleguen a conocer la relación personal, amable, poderosa y generosa que Dios quiere tener con ellos, y Su demostración de ello a través de Su hijo Jesús.
– Oremos para que los trabajadores entre los Rohinyá compartan acerca del Reino de Dios con claridad, pero con sabiduría; con compasión, pero con valentía.
– Oremos por aquellos Rohinyá que ayunan y buscan a Dios, para que tengan un encuentro con Jesús.