Una noche sentí la necesidad de visitar a una de mis queridas amigas rohingya. Cuando salía de mi apartamento, decidí llevarme un pequeño paquete de cuentos en inglés. Este paquete de historias contenía varias parábolas cortas de Jesús, y durante mucho tiempo quise compartírselo a mi amiga para ver si quería que las leyéramos juntas. Antes de tocar la puerta de mi amiga, le dije a Dios: «No estoy segura de lo que va a pasar en esta visita, pero por favor ayúdame a estar lista para lo que Tú quieras que pase».
Cuando entré a la casa de mi amiga, me preguntó qué tenía en la mano, y le dije que era un paquete de historias. Ella se sentó rápidamente y empezamos a leer juntas la historia de la moneda perdida (Lucas 15:8-10). Mi amiga se lo leyó dos veces y, en la segunda, lo comprendió muy bien. Hizo buenas preguntas como: «¿Qué es la alegría?» y «¿Qué significa ‘pecador’?». Conversamos sobre estas palabras y me animó muchísimo cuanto mi amiga interactuó con la historia. Espero tener más oportunidades de hablar de historias de verdad con ella.
- Por favor, ora para que se establezcan más interacciones como esta con mi amiga y que podamos seguir leyendo juntas las historias.
- Ora para que los Rohinyá de todo el mundo tengan corazones abiertos para escuchar y recibir las historias de Jesús.